Los crespells son un dulce tradicional de Mallorca, típicamente preparado durante la Semana Santa. Estas galletas tienen una textura crujiente y un sabor delicioso, y suelen tener formas variadas como estrellas, corazones, peces o animales, lo que las hace especialmente atractivas para los niños.
Descripción
Los crespells tienen un grosor de aproximadamente un centímetro y se caracterizan por su sabor suave y ligeramente cítrico, gracias a la ralladura de limón y el zumo de naranja que se utilizan en la masa. Se dice que tienen un origen judío, y su forma más típica, una flor de seis pétalos, podría representar la estrella judeomusulmana formada por dos triángulos superpuestos.
Ingredientes
- 1 kg de harina
- 8 yemas de huevo
- 400 g de azúcar
- 400 g de manteca de cerdo
- 120 ml de zumo de naranja
- 120 ml de aceite
- Ralladura de un limón
- Canela al gusto
Instrucciones
- Preparar la masa: En un bol grande, ralla la piel del limón y añade el azúcar, la manteca de cerdo, el aceite, el zumo de naranja y la canela. Mezcla todo con las manos hasta obtener una masa homogénea.
- Añadir la harina: Incorpora la harina poco a poco, mezclando continuamente con las manos hasta conseguir una masa compacta.
- Estirar la masa: En una superficie plana, espolvorea un poco de harina. Toma un trozo de la masa y estírala con un rodillo hasta que tenga un grosor de aproximadamente un centímetro.
- Cortar las galletas: Utiliza moldes de diferentes formas para cortar las galletas y colócalas en una bandeja de horno.
- Hornear: Precalienta el horno a 180 grados Celsius y hornea las galletas durante unos 25 minutos, o hasta que estén doradas.
- Enfriar y decorar: Deja enfriar las galletas y espolvorea azúcar glas por encima antes de servir.
Los crespells son perfectos para acompañar con un café o un chocolate caliente. ¡Espero que disfrutes preparándolos y degustándolos!
Los crespells tienen una historia rica y fascinante que se remonta a siglos atrás en la isla de Mallorca. Se cree que su origen está vinculado a la comunidad judía que vivía en la isla antes de la expulsión de los judíos de España en 1492. La forma más tradicional de los crespells, una flor de seis pétalos, podría representar la estrella de David, un símbolo importante en la cultura judía.
Con el tiempo, los crespells se han convertido en una parte integral de la cultura gastronómica mallorquina, especialmente durante la Semana Santa. Las familias se reúnen para preparar estos dulces, y es común que los niños participen en el proceso de cortar las galletas con moldes de diferentes formas. Esta tradición no solo fortalece los lazos familiares, sino que también mantiene viva una parte importante del patrimonio cultural de la isla.
Además, los crespells han evolucionado en su preparación y presentación. Aunque la receta básica se ha mantenido bastante constante, algunas variaciones modernas incluyen ingredientes adicionales como el chocolate o la mermelada, adaptándose a los gustos contemporáneos sin perder su esencia tradicional.
No hay una leyenda específica ampliamente conocida asociada a los crespells, pero su historia está llena de simbolismo y tradición. La forma de flor de seis pétalos, que se cree que representa la estrella de David, sugiere una conexión con la comunidad judía de Mallorca antes de su expulsión en 1492. Esta forma y su preparación durante la Semana Santa podrían simbolizar la esperanza y la renovación, temas comunes en muchas leyendas y tradiciones religiosas.
Además, la preparación de crespells en familia durante la Semana Santa ha generado muchas historias y recuerdos personales que se transmiten de generación en generación. Estas historias familiares, aunque no sean leyendas en el sentido tradicional, enriquecen la cultura y la tradición de los crespells, haciendo que cada galleta tenga un significado especial para quienes las preparan y disfrutan.
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