Patatas revolconas

Las patatas revolconas, también conocidas como patatas meneás, son un plato tradicional de la gastronomía española, especialmente popular en las provincias de Ávila, Salamanca, Cáceres y algunas zonas de Toledo.

Este plato, de origen humilde, ha perdurado a lo largo de los años gracias a su sencillez, sabor y la calidez que aporta en los días fríos.

Origen e Historia

El origen de las patatas revolconas se sitúa en las zonas rurales de Castilla y León y Extremadura.

Surgió como una comida humilde de campesinos, que aprovechaban ingredientes básicos y asequibles para crear un plato energético y reconfortante. Las patatas, introducidas en España en el siglo XVI, se convirtieron rápidamente en un alimento esencial en la dieta de las clases populares debido a su fácil cultivo y alto valor nutritivo.

La denominación «revolconas» proviene del proceso de preparación, que implica «revolver» o «menear» las patatas hasta obtener un puré homogéneo.

Este plato también es conocido como «patatas meneás» o «patatas removidas» en distintas regiones, reflejando la misma técnica culinaria.

Ingredientes y Preparación

Los ingredientes básicos de las patatas revolconas son:

  • Patatas: Preferiblemente de calidad, ya que son la base del plato.
  • Pimentón: Generalmente dulce, aunque se puede añadir una pizca de pimentón picante para intensificar el sabor.
  • Ajo: Aporta un toque aromático esencial.
  • Aceite de oliva virgen extra: Fundamental para sofreír los ingredientes y enriquecer el puré.
  • Torreznos o panceta: Se utilizan como acompañamiento crujiente, contrastando con la suavidad del puré.

La preparación tradicional consiste en cocer las patatas peladas hasta que estén tiernas.

Mientras tanto, se sofríen los ajos en aceite de oliva hasta que estén dorados, momento en el cual se retiran del fuego y se añade el pimentón, evitando que se queme. Las patatas cocidas se escurren y se machacan hasta obtener un puré, al que se incorpora el sofrito de ajo y pimentón, mezclando bien para que adquiera un color y sabor homogéneos. Finalmente, se sirve el puré acompañado de torreznos o panceta frita crujiente.

Variantes Regionales

Aunque la receta básica es similar en las distintas regiones, existen pequeñas variaciones que aportan matices únicos al plato:

  • Ávila: Se suele utilizar panceta adobada soriana como acompañamiento, y en algunas zonas se añade una hoja de laurel durante la cocción de las patatas para aromatizar
  • Salamanca: Conocidas como «patatas meneás», en esta región es común añadir una mezcla de pimentón dulce y picante para equilibrar los sabores.
  • Extremadura: Se emplea el reconocido pimentón de la Vera, que aporta un sabor ahumado característico al plato.
  • Toledo: En algunas zonas, se acompaña el puré de patatas con chorizo frito en lugar de torreznos, ofreciendo una alternativa igualmente sabrosa.

Evolución y Presencia Actual

Lo que en sus inicios fue un plato humilde de campesinos, hoy en día ha trascendido su origen rural para convertirse en una tapa apreciada en bares y restaurantes de toda España. Su sencillez y versatilidad han permitido que las patatas revolconas se adapten a los gustos contemporáneos, manteniendo su esencia tradicional.

En la actualidad, es común encontrar este plato en cartas de establecimientos que buscan ofrecer sabores auténticos y reconfortantes. Además, su preparación ha sido objeto de reinterpretaciones modernas, incorporando ingredientes como setas, trufa o incluso versiones veganas que sustituyen la panceta por alternativas vegetales.

Receta Tradicional de Patatas Revolconas

A continuación, se presenta una receta tradicional para preparar patatas revolconas en casa:

Ingredientes (para 4 personas):

  • 1 kg de patatas
  • 200 g de panceta o torreznos
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharada de pimentón dulce (se puede añadir una pizca de pimentón picante al gusto)
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal al gusto
  • Agua

Preparación:

  1. Pelar las patatas y cortarlas en trozos medianos. Cocerlas en una olla con agua y sal hasta que estén tiernas, aproximadamente 20-25 minutos.
  2. Mientras se cuecen las patatas, cortar la panceta en dados y freírlos en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que estén crujientes. Retirar y reservar sobre papel absorbente.
  3. En la misma sartén, añadir los ajos pelados y laminados. Sofreírlos hasta que estén dorados. Retirar la sartén del fuego y añadir el pimentón, removiendo bien para que no se queme.
  4. Escurrir las patatas cocidas y triturarlas hasta obtener un puré homogéneo. Incorporar el sofrito de ajo y pimentón, mezclando bien para que el puré adquiera un color uniforme.
  5. Servir el puré en platos individuales, coronando cada ración con los torreznos crujientes.

Valor Nutricional y Aporte Cultural

Las patatas revolconas son un plato energético, ideal para reponer fuerzas tras una jornada laboral intensa. Las patatas aportan carbohidratos complejos, mientras que la panceta proporciona proteínas y grasas que incrementan el valor calórico del plato. Aunque no es una opción ligera, su consumo ocasional en porciones moderadas puede formar parte de una dieta equilibrada.

Culturalmente, este plato representa la capacidad de las comunidades rurales para crear recetas sabrosas y nutritivas con recursos limitados. Además, su presencia en la gastronomía actual refleja la tendencia de revalorizar la cocina tradicional y los sabores de antaño.

Conclusión

Las patatas revolconas son un ejemplo perfecto de cómo la sencillez y la tradición pueden dar lugar a platos que perduran en el tiempo. Su sabor reconfortante y su versatilidad las convierten en una opción ideal para quienes buscan disfrutar de la auténtica cocina española. Ya sea en su versión más clásica o con toques

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