Ingredientes:
- Para la masa madre:
- 90 g de harina de fuerza
- 50 ml de leche
- 2 g de levadura fresca
- Para la masa principal:
- 340 g de harina de fuerza
- 20 g de levadura fresca
- 120 g de azúcar
- 2 huevos
- 80 ml de leche
- 60 g de mantequilla
- Ralladura de 1 naranja y 1 limón
- 1 cucharada de agua de azahar
- 1 cucharada de ron
- Una pizca de sal
- Para decorar:
- Frutas escarchadas
- Almendras laminadas
- Azúcar perlado
- 1 huevo batido (para pintar)
Instrucciones:
- Preparar la masa madre: Mezcla todos los ingredientes de la masa madre en un bol y deja reposar durante 3 horas o hasta que doble su tamaño.
- Hacer la masa principal: En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar, la sal, la ralladura de naranja y limón. Añade la levadura desmenuzada, los huevos, la leche, el agua de azahar y el ron. Amasa bien.
- Incorporar la masa madre: Añade la masa madre a la masa principal y sigue amasando hasta obtener una masa homogénea. Incorpora la mantequilla a temperatura ambiente y amasa hasta que la masa esté suave y elástica.
- Dejar reposar: Coloca la masa en un bol engrasado, cúbrela con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante 2 horas o hasta que doble su tamaño.
- Formar el roscón: Divide la masa en dos partes si quieres hacer dos roscones pequeños. Forma una bola con cada parte y haz un agujero en el centro para darle forma de roscón. Coloca los roscones en una bandeja de horno forrada con papel de hornear y deja reposar durante 1 hora.
- Decorar: Pinta los roscones con el huevo batido y decora con las frutas escarchadas, las almendras laminadas y el azúcar perlado.
- Hornear: Precalienta el horno a 180°C y hornea los roscones durante 20-25 minutos o hasta que estén dorados.
Más sobre el Roscón de Reyes:
El Roscón de Reyes es un postre tradicional que se consume en España el 6 de enero, Día de Reyes. Este dulce tiene una forma de corona y está decorado con frutas escarchadas que simbolizan las joyas de una corona. En su interior, se suelen esconder una figura de un rey y un haba seca. La tradición dice que quien encuentra la figura será coronado como rey o reina del día, mientras que quien encuentra el haba deberá pagar el roscón del año siguiente.
El origen del Roscón de Reyes se remonta a las celebraciones romanas conocidas como las Saturnales, que se realizaban en honor al dios Saturno. Durante estas festividades, que marcaban el final del invierno y el inicio de la luz, se preparaban tortas redondas con higos, dátiles y miel. En su interior se escondía un haba seca, y quien la encontraba era nombrado “rey de la fiesta” por un día.
Con el tiempo, esta tradición fue adoptada por los cristianos y se vinculó con la celebración de la Epifanía, el 6 de enero, que conmemora la visita de los Reyes Magos al niño Jesús. En España, el Roscón de Reyes se convirtió en una parte esencial de esta festividad, manteniendo la costumbre de esconder una figura y un haba en su interior.
Hoy en día, el Roscón de Reyes es un símbolo de alegría y celebración, y su preparación y consumo siguen siendo una tradición muy querida en muchas familias españolas.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.